Maternidad y amor, dos ideales que no siempre van juntos.
Escrita y dirigida por Michel Franco, esta película es un retrato de la maternidad desde dos perspectivas, la de la madre y la de la hija que se convierte en madre.
El talento de Franco se evidencia al alejarse del estereotipo de la madre mexicana, heredado del cine de oro y las telenovelas, para ofrecernos una visión realista, moderna e intima.
Esta es una película muy diferente a las anteriores realizaciones del director, se le siente más generoso con el público y más firme con la cámara y la pluma. Sin duda está encontrando su propia visión, prueba de eso son los tres premios al hilo que ha obtenido en Cannes.
Sin artificios, sin pirotecnia, con suma atención al desarrollo de personajes y a la actuación, rubro en el que destaca el trabajo de la española Emma Suárez, esta historia se desarrolla con naturalidad y lógica, a pesar de la vueltas de tuerca que más bien funcionan como catalizadores.
Una producción mexicana que vale la pena apoyar y reconocer como lo mejor de nuestro cine.